Con un juicio que, con más de 170 testigos citados, promete durar varios días en el mes de enero, los rugbiers acusados de asesinar a golpes a Fernando Báez Sosa serán oídos por primera vez en Dolores.
A pocos días de cumplirse tres años del asesinato a golpes de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell a la salida del boliche Le Brique, los ocho rugbiers acusados fueron trasladados a los Tribunales de Dolores esta mañana.
Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23) fueron movilizados por dos unidades del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) desde la Unidad 6 de Buenos Aires hasta el Tribunal de Dolores, donde serán juzgados por el crimen de Fernando (18).
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El debate inicio a las 9 de la mañana, una hora después de la llegada de los detenidos al juzgado, quienes fueron escoltados por uniformados del SPB y de la Dirección de Operaciones Especiales.
En este marco, la llegada de la madre de Báez Sosa conmovió a la prensa al expresar el dolor por el que aun pasa. “Nuestro corazón está destrozado. Fueron muy cobardes como atacaron a mi hijo y la herida es muy grande”, dijo la mujer. “Tenemos confianza en Dios”, sostuvo el padre de la víctima.
De esta manera, aunque sin confirmaciones de si los acusados quedaran alojados en Dolores durante el periodo que dure el debate o si solo se presentaran a la primera y a la última audiencia, fuentes cercanas al proceso de investigación indicaron que es probable que su asistencia se vea en todas las audiencias. “La sala del Tribunal está preparada para que vayan los ocho de manera presencial, durante todo el debate, con dos custodios y dos familiares por imputado”, explicaron.
