Investigadores de la Universidad de Stanford, en California, crearon un aerosol que convierte la piel en un “dispositivo inteligente”. Según explican en un artículo publicado en la revista Nature Electronics, el spray arroja una película sobre el brazo y la mano del usuario, permitiendo que un sistema de inteligencia artificial interprete sus movimientos. De ese modo, sería posible usar ingenios como los teclados holográficos.